Santiago 2:14-25, NBLA
La fe y las obras
14 ¿De qué sirve[l], hermanos míos, si alguien dice que tiene fe, pero no tiene obras? ¿Acaso puede esa[m] fe salvarlo? 15 Si un hermano o una hermana no tienen ropa[n] y carecen del sustento diario, 16 y uno de ustedes les dice: «Vayan en paz, caliéntense y sáciense», pero no les dan lo necesario para su cuerpo, ¿de qué sirve[o]? 17 Así también la fe por sí misma, si no tiene obras, está muerta. 18 Pero alguien dirá: «Tú tienes fe y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin las obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras». 19 Tú crees que Dios es uno[p]. Haces bien; también los demonios creen, y tiemblan. 20 Pero, ¿estás dispuesto a admitir[q], oh hombre vano[r], que la fe sin obras es estéril[s]?
21 ¿No fue justificado por las obras Abraham nuestro padre cuando ofreció a su hijo Isaac sobre el altar? 22 Ya ves que la fe actuaba juntamente con sus obras, y como resultado de las obras[t], la fe fue perfeccionada; 23 y se cumplió la Escritura que dice: «Y Abraham creyó a Dios y le fue contado por[u] justicia», y fue llamado amigo de Dios. 24 Ustedes ven que el hombre es justificado por las obras y no solo por la fe.
25 Y de la misma manera, ¿no fue la ramera Rahab también justificada por las obras cuando recibió a los mensajeros y los envió por otro camino?26 Porque así como el cuerpo sin el espíritu está muerto, así también la fe sin las obras está muerta.